martes, 6 de julio de 2010

"Eres mi ex, mi mejor amiga y la persona a la que amo y creeme si te digo que las tres cosas son dificilmente compatibles"


¡Qué difícil es estar enamorado y no poder gritarlo a los cuatro vientos, que es lo que uno realmente quiere hacer cuando eso sucede! ¡Qué difícil es echar de menos a alguien y no poder decírselo! ¡Qué difícil es intentar ser una femme fatale cuando lo único que deseas son unos mimos, un abrazo, un beso...!

Hay quien sirve para ocultar todo esto, y hay quien lo pasa mal porque no se ve capaz, porque le consume la energía el no poder hacer lo que realmente quiere como darse la mano dando un paseo, tomarse algo en una terraza mirándose a los ojos de esa manera que le hace a uno pensar cuán afortunados que son, ir a buscarse al trabajo para darse una sorpresa...

El deseo es terrible cuando debe ser ocultado, se puede convertir en una losa, en algo que poco a poco te va mermando, porque no te parece justo, porque quieres más, necesitas más, y la impotencia hace mella.

Además, el amor es lo más maravilloso de este mundo, cualquier clase de amor, y debería respetarse, sea como sea, se ame a quien se ame...


Otra cosa diferente es poner freno a unos sentimientos para directamente no enamorarse de la persona errónea, tratar por todos los medios de mantener los pies en el suelo, ser fría, distante, no sentirse vulnerable ni frágil porque sino el golpe será aún más terrible. Puedes intentarlo, por supuesto, puedes ponerle todo el empeño que quieras, pero una cosa es cierta, si te estás enamorando, o crees que te has enamorado, o simplemente notas algo dentro difícil de catalogar pero que te hace querer estar con esa persona... entonces, olvídate de todo, porque aunque huyas, va a estar ahí, y cuando le vuelvas a ver, a oír, a hablar, explotará y ya no habrá vuelta atrás, y estarás en el primer párrafo de esta entrada de este blog extraño. Y es que aunque nos moleste... SOMOS HUMANOS



"Y aunque el mundo se hunda bajo mis pies, seguiré gritando tu nombre"

1 comentario:

  1. Cuanta razón Ainara, somos humanos...
    Me encantaría ver el día en que la gente solo vea el amor por encima de todas las cosas, amor entre dos personas y no el sexo de las personas que sienten ese amor. Al ser humano, le encanta clasificarlo todo y ponerle etiquetas... Lo peor de todo es que no se da cuenta que esa actitud intolerante, le hace infeliz, que le limita, le vuelve más ignorante...

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